Cada minuto, 24 personas denuncian una agresión sexual en Estados Unidos y alrededor del 20% de las mujeres de ese país ha sufrido una violación, consumada o en grado de tentativa.
Esas son conclusiones de un nuevo informe del Centro para el Control de las Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
Además, el CDC concluyó que más de un millón de mujeres dijeron haber sido violadas en los últimos 12 meses, más de seis millones han sido víctimas de acoso y más de doce millones de mujeres y hombres reportaron una violación, violencia física o acoso por parte de su pareja a lo largo del año.
Los expertos del CDC describieron los resultados como "increíbles" y se enmarcan dentro de una problemática que está presente alrededor del mundo, hasta el punto que ONU Mujeres, la entidad de las Naciones Unidas para la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres, la califica como "un problema de proporciones pandémicas".
En América Latina, la situación no es menos dramática.
"Materia de preocupación"
Según datos compilados por ONU Mujeres desde marzo de 2011, el 40,2% de los encuestados en México reportó un hecho de violencia física o sexual en los últimos doce meses.
En Bolivia, esa cifra llegó a 24,2%, mientras en Ecuador se situó en 17,6% y en Perú, en 14,2%.
Según informa la misma agencia, en Sao Paulo, Brasil, una mujer es atacada cada 15 segundos, mientras en Perú, unas 75 mujeres son atendidas diariamente por casos de violencia sexual.
"Este tema está afectando tremendamente a las mujeres", le explicó a BBC Mundo Lucía Salamea Palacios, directora del programa regional de ONU Mujeres para la zona andina.
"Se ha visibilizado mucho en los últimos cinco años y ya es materia de preocupación por parte de los gobiernos", resalta.
Salamea agrega que en la mayoría de países de la región andina, la violencia sexual afecta de manera principal a las adolescentes entre 14 y 17 años.
Esta estadística concuerda a grandes rasgos con las del CDC para Estados Unidos, que encontró que la gran mayoría de las víctimas de violación lo fue durante su juventud.
Linda Degutis, directora del Centro Nacional para la Prevención y Control de las Lesiones del CDC, detalla que al menos el 80% tenía 25 años o menos y que el 35% de las mujeres que fue violada cuando era menor de edad, volvió a sufrir una agresión del mismo tipo en la edad adulta.
Patrones culturales
Según Salamea, la problemática en América Latina es delicada por "los patrones culturales, el manejo del poder, la manera de pensar y las sociedades patriarcales".
Agrega que "en los países latinoamericanos perdura el tema del machismo".
"Muchas mujeres justifican la existencia de la agresión en la pareja como la necesidad de que una persona tiene que mostrar que es la más fuerte y la que ordena en casa", explica.
Salamea añade que se ve una mayor incidencia de casos "en los sectores afectados por la pobreza y en situaciones de mayor vulnerabilidad", pero hace énfasis en que estas particularidades no son razones por sí solas.
"No sólo la educación es un determinante. No sólo la pobreza es un determinante porque justamente estamos hablando de una manera de pensar, de patrones culturales que cruzan todos los estratos de la población".
Hispanas en Estados Unidos
En el caso de Estados Unidos, el estudio del CDC sugiere que la incidencia de víctimas de violación es algo menor entre las estadounidenses de origen hispano.
Si ronda el 20% entre las mujeres blancas (18,8%) y de raza negra (22%), al hablar de las hispanas, el estudio calcula que la cifra es de un 14,8%.
Sin embargo, en lo que se refiere a la violencia sexual que no alcanza el grado de violación, la situación de las hispanas es sensiblemente peor.
Si las denuncias de agresiones que no son violación es del 41% de las mujeres de raza negra, el 48% de las de raza blanca y 49% de las originarias, para las hispanas es de un 58%, claramente por encima del resto de grupos.