El joven tibetano que se prendió fuego el pasado lunes en Nueva Delhi durante una protesta contra la visita del presidente chino, Hu Jintao, a la India, murió ayer en el hospital a consecuencia de sus graves heridas, según informó un activista.
Jamyang Yeshi, de 26 años, estaba hospitalizado con quemaduras en el 90% de su cuerpo. Yeshi se había prendido fuego en la víspera de la participación del mandamás chino en la cumbre de los países BRICS (países emergentes), que comenzó ayer con la participación de los líderes de Brasil, Rusia, India, China, Sudáfrica.
Unos 30 tibetanos se han inmolado en el último año contra el gobierno de Pekín y con el fin de pedir el regreso del Dalai Lama.
Por su parte el gobierno chino acusa al líder religioso de propiciar actos suicidas, algo que él ha negado en reiteradas ocasiones.
